Misa por la Educación

Como todos los años la Vicaría de Educación del Arzobispado de Buenos Aires, invitó a todas las escuelas a participar de la Misa por la Educación. El encuentro, que se realizó el 26 de abril en la Catedral Metropolitana, fue presidido por nuestro Arzobispo, Cardenal Mario Aurelio Poli y contó con la presencia del Ministro de Educación Lic. Esteban Bullrich.

Nuestro colegio en respuesta al llamado del Cardenal, concurrió a la Misa con un grupo de alumnos de 5 año comercial, los abanderados y escoltas de las banderas Nacional, los abanderados de 7° grado de la bandera Papal y directivos del Nivel Primario y Secundario.

En su homilía el Cardenal nos impulsó a renovar el entusiasmo apostólico, contagiando en nuestras comunidades el deseo de evangelización, y vinculó la Misa por la Educación con un paso más hacia el Sínodo, que como Iglesia de Buenos Aires hemos comenzado a recorrer.
El Sínodo nos permitirá sintonizar con el espíritu de servicio misericordioso que nos enseñó Jesús. Será también una oportunidad para reavivar el entusiasmo apostólico, que contagie en nuestras comunidades el deseo de un renovado testimonio de nuestra fe, capaz de anunciarlo a quienes no lo conocen. Una iglesia sinodal está mejor preparada para evangelizar nuestra ciudad.
Que el Sínodo porteño nos permita cumplir con el deseo del Papa Francisco para con toda la Iglesia: «Sueño con una opción misionera capaz de transformarlo todo» (EG 27). Cuando en el 2020 nuestra arquidiócesis cumpla los 400 años de vida, es mi deseo –confiando en la ayuda de Dios–, que la celebración nos encuentre unidos y trabajando en ese propósito.»

ORACIÓN PARA EL SÍNODO ARQUIDIOCESANO

Padre Misericordioso,
como Iglesia de Buenos Aires
queremos ponernos en camino.
A la escucha de la Palabra de tu Hijo
y escuchándonos entre nosotros.

Queremos ser misioneros misericordiosos,
aprender a detenernos,
y ser compasivos ante toda miseria humana.

Que tu Espíritu de amor nos impulse,
para hacer de nuestro Sínodo
un espacio de comunión y renovación.

Madre del Buen Ayre, no nos desampares.
San Martín de Tours, ruega por nosotros.

Amén.